За здоровье!

Hoy mi compañía es una pala oxidada, que me tiene a mí y yo a ella sólo para enterrar recuerdos y personas sin valor, con todo y sus hedores putrefactos de realidad descompuesta; las lágrimas que dejaron de ser lagrimas y se convierten en piedra escupida (no esculpida). Que se quede ella en la burbuja que siempre explota y que siempre cae desde la altura más alta de la estructura construída con las risas más falsas, que descubra que la soledad es más que no tener con quiénes disfrutar de las situaciones más superfluas de una vida plástica. Hoy yo ya estoy curado. Brindo y salgo a ver de nuevo en arlequín.

SALUD!
За здоровье!

1 comentario:

Uno que mira dijo...

Mi comentario al respecto empieza con:

"Este oficio de sepulturero no me luce..."