Y ESTAMOS COMO ANTES...


16-marzo-2008 11:30pm / PALO VERDE.

Y aquí estamos. Vos conmigo y yo con vos. Me ves como queriendo consolarme. Aún sin entender qué ocurrencias manejamos los humanos. Cómo es que estamos felices un día y al siguiente, sin razón aparente estamos tristes -pensás. Pues razones amiga, tenemos muchas o al menos en este momento siento que tengo miles. Vos la conociste, en algún momento llegaste a sentir sus manos y te lo cuento como un secreto que nunca debí decirte: al principio no le caías bien!.
Te repito, la conociste y los dos sabemos lo que valía. Sabés lo que es para mí; pues también sabés lo que sucedió. Me acompañaste en esas noches que se tornaban amargas. En aquellas llamadas de media noche que nos hacía sentir cada vez con más frecuencia y exactitud la ubicación de nuestros hígados. El mío y el de ella.
Fuiste testigo de mis sueños antes de que todo comenzara, de lo que imaginaba y lo que deseaba. Oías desde lejos mientras fingías estar dormida; cuando yo contaba ante todos lo maravillosa que era esa ´´compañera de la U´´. Lograbas ver por casualidad los dibujos que yo orgulloso me dejaba impresos en la piel, haciendo creer que por rapidez había olvidado borrarlos con jabón; eran los dibujos de ella. Lo viste todo amiga, y vos me comprendés porque siempre has estado conmigo o al menos en ese proceso casi adictivo en el que caí con ella.
Siempre supiste que la quise, veías cuando me iba a alegre y volvía hasta tarde más alegre y a lo mejor ni te prestaba atención en mi despiste. Aún así seguías alegrandote de mi llegada y te bastaba con que tocara ligeramente tu cabeza con mi mano, que acababa de estar en las manos de ella.
Estuviste ahí en algún lugar, tal vez sentada, tal vez correteando por la casa mientras yo vivía a kilómetros de donde estabas lo mejor con ella. Me alejé de vos, estaba mejor con ella, me sentía mejor ahí. Yo era todo para ella y ella aún más para mí. La fantasía era nada porque ella era realidad y por eso llegaste a verme tantas veces con esa cara mía, boba de felicidad y escuchabas nuevamente como siempre hablaba de ella, con quien fuera o sobre cualquier cosa que viniera al tema. De vez en cuando jugaba con vos, eso lo recuerdo, pero mi felicidad era infinitamente más grande que la tuya al correr en libertad y eso lo sabés.
¿Qué estarás pensando en este momento? Estás confundida al verme así. Te preguntarás: ¿Dónde está aquel que veía en color? Y que de pronto quedó en nada, viendo nada y sintiendo mucho. Eso no lo entendés, yo lo sé. Muchas veces me tocó verlo desde tu punto de vista, desde el balcón de lo ajeno, de lo que no me pasaba a mí. Pero ahora yo soy el protagonista y te cuento la historia que nos tocó vivir. Ella la contará como lo ve ella. De lo que nos pasó, ella junto a mí y yo junto a ella.
De repente las cosas se hicieron más espesas. Yo no te miento amiga, los dos lo intentamos y de eso no hay ninguna duda. A lo mejor faltó más pero hasta ese punto logramos llegar.
Y te soy sincero, yo lo imaginé diferente. Pensé que se podía cumplir lo que alguna vez ella y yo hablamos, en lo más firme del terreno en el que estábamos. Bien lo recuerdo y creo que se olvidó con el tiempo que erosiona como el viento. Aquello de que llegado el caso no podríamos fingir que nunca fuimos algo. Apreciémonos como personas aunque en el ámbito ‘’novelezco’’ no hayamos logrado entendernos.
¡Vos sabés para mí lo que ella significa! De un momento a otro ella ya no quiere nada conmigo, quiere espacio y eso lo respeto pero quiero saber cómo está, nada más. Pues por más extraño que parezca, termino siendo ‘’irrespetuoso’’ y vos me conoces, yo solo quería saber eso. Bueno, hasta terminé sabiendo que de ‘’arriesgarme’’ a seguir queriendo saber de ella, corro el riesgo de terminar, ahí sí, en muy malos términos. Así que me quedo callado, en silencio queriendo gritar pero silencio. Entendés ahora ¿Por qué he estado así hoy? ¿Por qué el día para mí es intermitente?. Quisiera que me hablaras y que me lograras decir ¿Qué fue lo imperdonable que hice? ¿Porqué no podés hablar?.Claro, así es mejor. Hasta llegás a sentir lástima de nosotros los humanos, eso también lo sé.
Vos la conociste, de seguro sabés la respuesta; aunque también sabés que ella no es así. Detrás de ese escudo que ella pone frente a mí está la persona que alguna vez fue tierna, sensible, dulce, y todo lo que no hace falta que siga nombrando que sabés que admiro de ella. Siempre me escuchabas diciendo fuerte y orgulloso de poder decir a todas voces; confiado y con la voz clara: todo lo que ella es.
¿Será tan sencillo, así como alguien hace que olvida o que no le importa? Hasta donde sé nada fatal pasó entre los dos. Y me viste siempre siendole fiel, también llegaste a ver en mis ojos la confianza que le tenía, que le tengo. Así que amiga, te comprendo si no entendés a este género humano que es complicado. A veces ni yo mismo me entiendo. Me has visto llorar sin poderme consolar más que enseñandome esos ojos profundos tuyos. Has visto lo cambiante que he estado. Has visto cuando me consumo en pensamientos y me pierdo lejos, tratando inútilmente de responderme si ella pensará en mí viendome como un alegre recuerdo o si será que evita pensar en nuestro pasado? No lo sé ni vos tampoco supongo.
Me verás entonces amiga como antes me veías. Esperando tener a alguien para darle tanto que quiero dar. Para aplicar lo aprendido y lo cambiado. Para seguir siendo feliz en un camino que de pronto cambió. Me verás tratando de hacerla feliz, queriéndola como alguna vez la quise a ella. Pero el buen recuerdo jamás será borrado. Y me alegraré siempre de verla, Reiré cuando me la tope y le tenderé mi mano siempre que ella lo necesite, y lo permita.
Pues sé que aún estás confundida Gea compañera de siempre, pero creeme que desearía ser vos y jamás haber sabido lo que es ese tipo de dolor, eso tan humano y que todos debemos pasar desgraciadamente. Una amiga como vos, es un hecho, sólo se encuentra en la especie CANINA. Gracias por estar a mi lado esta noche fría de montañas altas, al calor del fuego viéndome con los ojos de antes y de siempre, en tu mundo adormilado como en tiempos aquellos antes de estar con ELLA.